Bienvenid@ a mi habitacion... En ella encontrarás cosas de las que no se hablan en lo público, asi soy, más que vivir sobrevivo con mis temores hacia un espejo que me refleja tan cual soy.

Aqui encontrarás a alguien que en cierto modo te entiende, te apoya, sabe lo duro de tu promesa de perfeccion... Y si no perteneces a la corte de la Reina Gélida te pido que abandones este blog, ya que nada de tu interés hay aqui...

Ayer pude verla: tenia alas de cristal, huesos tan blancos como la luna, finos y largos cabellos negros, su silueta ondeaba con el viento... Su nombre era Ana y yo la vi pasar, deseándo ser como ella...

martes, 29 de marzo de 2011

Principes...



estan aca con nosotras y comparten nuestra promesa de perfeccion... nuestros delirios y viven en el castillito de cristal soñando con alcanzar una meta, un sueño, y un delirio para los demas....


he leido algunos comentarios de princesas que no los hayan lindos... pero yo encuentro en ellos un encanto mistico y dificil de explicar... ´


Bueno, eso es lo que pienso, me gustaria saber que piensan

Saludos desde la Luna Azul

2 comentarios:

  1. Alteza!

    Gracias por tu coment y los ánimos, ya terminé mi rutina, me bañé y ahora descanso n_n. Fijate que alguna vez yo entre al blog de un príncipe y casi dicen lo mismo que nosotras, son jueces duros de su persona, comparten sus frustraciones, hablan de su dia a dia... pero tengo la impresión de que son en su mayoria gay, no es que tenga nada en contra de eso para nada tengo muchos amigos que lo son y son divinos, pero creo que los hombres heterosexuales lo último que quieren es ser flacos tal cual, ellos quieren ser grandotes y tener músculos (bueno la mayoría) y a mi en lo personal no me atraen nada los chicos tan delgados... aunque el de la última imagen no esta nada mal jajaja.
    No se a que te refieres con que las prin los ven mal, explicame XD yo no veo nada malo en eso.

    Besotes linda, cuidate mucho.

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  2. Gracias por anotarte en mi carera.

    Pues a mi me encantan. A demas mi amor es un principe. Con sus perfectos 50 kilos.

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